En un bosque cerca de Kusinagara, el Buddha Shakyamuni pasó sus últimas horas antes de alcanzar el paranirvana. En esta ocasión, Ananda ―su primo hermano y uno de sus monjes y discípulos principales– le preguntó al Buddha si un amigo, compañero y apoyo espiritual virtuoso eran la mitad de la vida espiritual. A eso, el Buddha le respondió:
Un amigo espiritual virtuoso, un compañero virtuoso, una ayuda virtuosa es el todo, la no adulterada, la completa, la pura, la vida santa totalmente purificada; pero un amigo espiritual no virtuoso, un compañero no virtuoso, una ayuda no virtuosa no lo es
―Extraído del Kalyanamitrasevanasutra, El Sutra de la Confianza en un Amigo Espiritual Virtuoso
Así pues, ¿quién es exactamente la sangha budista de la que el Buddha hablaba? Y ¿por qué representa el cien por cien del camino?
La sangha budista está compuesta por los seres realizados ―que muchas veces juegan el rol de amigos espirituales virtuosos que nos inspiran a mejorar y a los que podemos seguir de distintas formas―, los practicantes monásticos ―que se entregan al Dharma renunciando a la vida de familia y se convierten en un apoyo para los laicos― y los practicantes laicos ―que, además de poner en práctica las enseñanzas, son también un sostén para los monásticos―.
Indagamos ahora en descubrir algo más sobre la sangha y por qué es una parte integral de nuestro desarrollo en el camino.
Contenidos
- El amigo espiritual es el cien por cien del camino
- La Sangha realizada
- La Sangha ordenada
- La sangha laica
- La sangha, los buddhas del futuro
1. El amigo espiritual es el cien por cien del camino
Honestamente, mi comprensión de la importancia de la sangha dista mucho de ser perfecta. Lo que sí resulta evidente es que somos animales sociales y que, como tales, los demás tienen un gran impacto en nuestras vidas.
Gracias a los demás no solo satisfacemos nuestras necesidades básicas e incluso las afectivas, sino que también podemos llegar a tener acceso a un sentido profundo de la vida y a unas herramientas válidas para mejorarnos como personas. Además, resulta evidente que las personas nos influimos unas a otras, pudiendo inspirarnos para mejorar. Por ello, la sangha juega un papel fundamental en nuestro desarrollo personal y espiritual.
Los amigos espirituales nos apoyan y acompañan en los altibajos del camino. Tomamos refugio en las Tres Joyas, pero puesto que no vivimos en el tiempo del Buddha Shakyamuni, la referencia más próxima que tenemos ―tanto del Buddha como de los estados espirituales, que son el Dharma― es la propia sangha.
Y, si reflexionamos, nos daremos cuenta de que incluso los practicantes del presente son los buddhas del futuro. Así pues, independientemente de las faltas y oscurecimientos que mostremos hoy, en un futuro todos vamos a ser seres realizados.
2. La Sangha realizada
La Sangha realizada es la principal sostenedora del Dharma. Ya que el Dharma tiene dos dimensiones ―los textos y enseñanzas, y los estados espirituales a los que hacen referencia―, estando realizados, estos miembros de la Sangha ―monásticos y laicos― son cruciales para mantener el budismo vivo, pues tienen cierta maestría en estos estados espirituales.
También, gracias a ello, nos pueden acompañar y guiar a aquellos que recién nos estamos introduciendo en el camino, favoreciendo que nos acerquemos gradualmente a dichos estados.
Por eso es importante para el desarrollo del Dharma en general, y en Occidente en particular, que haya seres realizados. Para el beneficio de todos los seres, deberíamos aspirar nosotros mismos a realizarnos y poder acompañar a otros en el futuro.
Como exponentes reconocidos por muchos como Sangha realizada tenemos tanto a S. S. el Dalái Lama como a S. S. Gongma Trichen, el 41.º Sakya Trizin, ejemplos vivientes de la compasión, sabiduría, poder y una actividad incansable para beneficiar a los seres.
3. La Sangha ordenada
Para que el Dharma pueda establecerse en un lugar, el Buddha expresó que era indispensable que hubiese Sangha ordenada ―monástica― y también sangha laica.
A lo largo de la historia, la Sangha ordenada ha sido y es indispensable para asentar y expandir el Dharma. Cuando un buddha se ilumina no necesariamente establece una Sangha monástica. Por tanto, es significativo que el Buddha Shakyamuni así lo hiciera. Además, de entre los practicantes, es difícil saber quiénes tienen realizaciones y quiénes no. Por eso un practicante monástico resulta la representación más cercana del Buddha.
Adicionalmente, con el transcurrir del tiempo, la Sangha ordenada ha sido la sostenedora de las enseñanzas sirviendo como ejemplo y referencia de buena conducta y de erudición, protegiendo así la continuidad del Dharma.
Por ello resulta vital incrementar nuestro aprecio, respeto y reverencia por nuestras amigas y amigos ordenados.
Hay muchos monásticos ejemplares que nos pueden servir como inspiración. Entre ellos podemos pensar en las numerosas cualidades y en la vasta actividad que realizan tanto Khenpo Pema Wangdak ―uno de los maestros del venerable Lama Rinchen― como el propio ven. Lama Rinchen… por supuesto, entre muchos otros que también son inspiradores.
4. La sangha laica
Ahora, si eres un practicante laico, no deberías menospreciar la valía que tienes, ya que el Buddha señaló que también la sangha laica es necesaria para que el Dharma pueda enraizarse y florecer en un lugar. Esto es posible debido a los esfuerzos que hace la comunidad laica por sostener a la comunidad monástica ―proveyendo a esta con los recursos necesarios―.
Por ejemplo, gracias a los patrocinadores y voluntarios de distintos centros, existen muchos cursos y enseñanzas gratuitos, tanto online como presenciales. Además, a lo largo de la historia, grandes reyes y mecenas dieron protección a las enseñanzas permitiendo que pudieran prosperar. Por eso, cualquiera sea nuestra aportación ―como voluntarios, practicantes, patrocinadores…―, esta resulta indispensable para que el budismo se establezca y permanezca.
Además de esta simbiosis, ha habido muchos seres realizados laicos que han contribuido a que las enseñanzas se introduzcan y prosperen.
Dentro de la Tradición Sakya ―a la que pertenecemos―, muchos son los adeptos laicos que nos pueden ayudar de diversos modos, incluido su ejemplo. Entre ellos, los hijos de S. S. Gongma Trichen ―sus santidades el 42.º Sakya Trizin y el 43.º Sakya Trizin―, aunque ciertamente no son los únicos, ya que a lo largo de la historia y en todas las tradiciones ha habido practicantes laicos muy comprometidos que han contribuido con las enseñanzas.
5. La sangha, los buddhas del futuro
En resumen, como miembros de una gran sangha que sigue la estela del Buddha, nuestro rol es valioso tanto entre nosotros como miembros de esa sangha como para con el resto de la sociedad. Todos nosotros, monásticos y laicos, somos representantes del Buddhadharma. Y, conforme vayamos avanzando en el camino, mantendremos vivos los estados espirituales del Dharma hasta que nosotros mismos los perfeccionemos y alcancemos la budeidad.
Si te interesa profundizar en esta enseñanza ―El Kalyanamitrasevanasutra o El Sutra sobre la confianza en un amigo espiritual virtuoso―, está disponible para descargar aquí en español, o en inglés online en 84000.co.
¡Que la disfrutes!
En mi experiencia, contar con amigos espirituales me ha motivado a seguir el estudio y la práctica del Dharma. Si quieres hacerlo en grupo o si buscas ayuda, soporte o inspiración en los altibajos del camino, puedes encontrarlos en los Grupos Paramita que hay repartidos por todo el mundo.
Si necesitas saber si hay un grupo en tu comunidad o cerca de ella, consulta la información en este enlace.
Y a ti, ¿qué te ha aportado formar parte de una comunidad de practicantes?
¿Cómo te inspiran tus amigos espirituales?
¿Qué puedes hacer para servir de inspiración a otras personas?
¡Relata tu experiencia en los comentarios!
13 comentarios
Articulo muy inspirador y muy reconfortante saber que está la Sangha para apoyarte y ayudarte.Muchas gracias Jonas
Gracias Jonás, desde luego todo el equipo de Paramita y la fundación, son una inspiración que mejoran la vida aportando su experiencia y sabiduría
Muchas gracias por compartir estas reflexiones, son muy útiles y motivadoras, en particular ,el formar parte de una Sangha ( en mi caso un grupo de estudio gestionado por Paramita) me dota de entusiamo, claridad, seguridad y una alegría enorme de compartir lo que se y lo que no se 🙂 con personas que están en el mismo camino, como decimos a veces en nuestro grupo, nos sentimos comprendidos. Enormemente agradecida!
Muchas gracias a ti también Delphine
Muchas gracias Cratos, coincido contigo en que la fundación es una fuente de inspiración. Desde los voluntarios y residentes, hasta el venerable Lama Rinchen y los maestros del linaje, todos ellos aportan con su ejemplo y dedicación.
Muchas gracias Cristina. Sí ciertamente los grupos de paramita son un gran apoyo. Me alegra que te motive tanto.
Muchas gracias Jonás por compartir esa reflexión. Muy cierto, la Sangha nos inspira, nos apoya, nos guía y nos anima en cada paso del camino. Siempre agradecida🙏💙
Hola Jonàs 🙂 platique contigo en el retiro del gran compasivo, muchas gracias por tu reflexiòn =) me gusto mucho! un abrazo!
Agradezco mucho este artículo ya que soy nueva en el budismo, recién tome refugio con el Ven. Lama Rinchen en su visita a Chile.
Muchas Gracias Jonás, es un honor tenerte en nuestra Sangha de Canarias, todo y que actualment no puedas estar por tus estudios. Por supuesto la Sangha es muy importante nos sentirnos apoyados en todo momento, también estar en la Sangha es un gran aprendizaje ya que tos@s aprendemos de tod@s, sobre todo a escuchar y aprender a pensar… La Sangha nos motiva y crea entusiasmo en seguir en el camino correcto el Dharma, además tenemos la gran oportunidad y posibilidad al tener a nuestro lado el amigo, maestro y guia espiritual Ven. Lama Rinchen Gyaltsen que nos inspira impartiendo las enseñanzas genuinas de Buda de manera entendibles y comprensibles…Y muchísimas gracias a todo el equipo Paramita por hacerlo posible. Que se expandan las Sanghas para el beneficio de tod@s los seres sintientes.
Muchas gracias Jonás!!!
Muy inspirador el artículo!!!
Gracias a ti he conocido el budismo y ahora
siento que ha crecido mucho la familia. Ahora es infinita…
Debemos seguir mejorando para el beneficio de todos los seres…
Infinitas gracias a ti, al Lama Rinchen, a todo el equipo Paramita y a todos los seres!!!
Que siga girando la rueda del Dharma!!!
Un fuerte abrazo
Gracias!
Muchas gracias!!! muy claro